CRONICÓN DE LAS COSAS SUCEDIDAS EN ESPAÑA.
No me atribuyo ningún saber gramatical al hacer especial énfasis en que el empleo de impropiedades sintácticas, pueden dejar en entredicho a personas que pueden dominar una materia, circunstancia por la que me permito recomendar, que al hablar o escribir hay que evitar las palabras que habitualmente no se emplean, pero de hacerlo da muy buen resultado consultar previamente el Diccionario de la Lengua; instrumento que le salvará en algún que otro caso de posibles contradicciones y desajustes gramaticales que confundirían al lector.
Sin embargo los ejemplos de escritos con palabras que no cumplen su sentido, se ven a menudo, poniendo en evidencia a escribanos, que probablemente podían saber mucho de lo que pretendían decir.
Veamos, ¿qué pensaría usted, si en un escrito referido a historia leyera la palabras “cuento y cronicón” como sinónimas, negando la primera a la segunda su papel como fuente de la historia?, seguramente pensaría que el que escribe está confundiendo significados, aún cuando tal vez quisiera usar intencionadamente “cuento y cronicón” como sinónimas , para amplificar o reforzar la falsedad de lo que expone, sin darse cuenta de que está empleando dos palabras antónimas en un terreno que le es propia a la segunda, si lo que pretende decir es que algo históricamente es falso o ficticio, con decir que es un cuento sobra cronicón, impropiedad gramatical que está haciendo dudar al lector sobre los conocimientos históricos del que escribe.
Antes de proseguir, debo hacer especial hincapié en que un cuento es una narración breve de ficción. Un cronicón, no es ficción, aunque también es una narración breve, pero de historia, expuesta en orden cronológico, por tanto cuento y cronicón no son palabras sinónimas, sino todo lo contrario, ya que “cuento no es historia y cronicón es historia”, por lo que vuelvo a sugerir que antes de escribir, según que cosas, va muy bien consultar el diccionario, en este caso de antónimos y sinónimos o palabras afines.
¿Ha oído usted hablar de LA “HISTORIA GOTHICA”?
Es la obra del Arzobispo de Toledo, Rodrigo Jiménez de Rada que escribiera en latín por encargo de Fernando III el Santo, conocida por “De rebus Hispaniae” y titulada “CRONICÓN DE LAS COSAS SUCEDIDAS EN ESPAÑA”, aquí tiene un título muy acorde con lo que digo, son nueve “libros de historia” que narran el pasado de nuestra península, partiendo de sus primeros pobladores. Cronicón que su interés radica en que el autor es el que utiliza por primera vez las fuentes de la historiografía hispánica no islámica, incluye las genealogías de los reyes de Aragón, Navarra y Portugal, así como los monarcas castellanos-leoneses y su antecesores asturianos. Dado el interés de la obra, escrita en una prosa magnífica, el dominio de varios idiomas del Arzobispo Rodrigo Jiménez de Rada, le da la oportunidad de traducir infinidad de documentos para escribir sus nueve tomos, es decir que hace uso de la historiografía que es el registro escrito del pasado, pretendiendo demostrar cómo la característica principal de los habitantes de la península Ibérica , a los que considera hispanos, fue el largo dominio de los visigodos , a los que dedica la parte más significativa del trabajo llamado, la HISTORIA GOTHICA, razón por la que es conocida. Otras partes de la obra las dedica , como si de monografías se tratara, al estudio del resto de los pobladores, como fueron los romanos, los ostrogodos, los hunos, los vándalos, los suevos, los alanos y los árabes, a lo que hay que agregar que el valerse de la fábula para las fases más antiguas, no significa en manera alguna que “Cronicón de las cosas sucedidas en España” haya sido considerada por nadie como un cuento, debiendo significarse que este magnífico trabajo histórico, fue traducido a las principales lenguas romances y ha sido considerado durante muchos siglos como una de las fuentes ineludibles para el estudio del pasado de España, de todas maneras gran número de historiadores han vuelto con muchísimo interés a los fundamentos del conocimiento teórico, planteándose las relaciones entre la literatura narrativa y la historia, lo que nos sugiere la posibilidad de que la historia, después de todo, sea una literatura que trabaja sobre materiales eruditos, por lo que no se puede negar que también la literatura es otra fuente de la historia, siendo éste el camino emprendido por el Arzobispo Jiménez al escribir su Cronicón de las cosas sucedidas en España en la primera mitad del siglo XIII, lo que me sugiere que más o menos es lo que pretende Don Antonio Aguilar y Cano con su “MEMORIAL OSTIPENSE”, al que debemos calificar como una fuente muy estimable de nuestra historia de Estepa, así como “ guía para investigadores”, como dijera Juan Luis Machuca Fernández en su Conferencia “La Vida y Obra de Aguilar y Cano” con motivo del 25 Aniversario de la fundación del Instituto de Enseñanza Secundaria “Aguilar y Cano”.
Don Antonio Aguilar y Cano en algún lugar de su Memorial también hace alusión también a “ De Rebus Hispaniae”, en otros términos “Cronicón de las cosas sucedidas en España”, fuente ineludible del pasado
No hay comentarios:
Publicar un comentario